¿Cómo nace Nubolo?

Nubolo nace de una necesidad real. Nace pensando en encontrar una solución para un problema no resuelto. Nace para ayudar a la sociedad. Nubolo nace de un caso particular: Isidre Esteve.

Isidre Esteve, corredor de rallies y otras competiciones automovilísticas, sufrió un accidente de motocicleta durante la prueba Bajo Almanzora el 2007. El diagnóstico fue contundente: sus vértebras T7 y T8 estaban fracturadas, y por lo tanto, no podría volver a andar.

A pesar de ello, Isidre no perdió las ganas de vivir, y con entusiasmo continuó con su proyecto deportivo iniciando una nueva etapa en su carrera profesional compitiendo con un coche adaptado. Con él participó en el Dakar 2008. Sin embargo, las condiciones durísimas de una prueba de este nivel le provocaron una grave úlcera que lo mantuvo encamado durante meses. Durante este tiempo buscó opciones existentes para poder moverse sin afectar la curación de la úlcera, y buscó soluciones en el mercado que le permitieran volver a correr en un futuro sin riesgo a padecer otra UPP. Sin embargo, no parecía existir una solución eficaz.

En este proceso de búsqueda infructuosa nació su nuevo proyecto: Isidre Esteve tomó el valiente reto de encontrar la solución que le haría recuperar su pasión y, junto a más colaboradores sin ánimo de lucro, idearon y crearon un cojín inteligente que ayudara a la gente con problemas de movilidad a evitar la aparición de UPP. Era por lo tanto un proyecto social, un proyecto pensado para contribuir a mejorar la calidad de vida de los pacientes con problemas de movilidad. Un proyecto enfocado a encontrar una solución a una necesidad real.

Cinco años de trabajo culminaron con un prototipo de cojín inteligente y con el regreso del piloto a las competiciones, entre ellas el Dakar 2017. En el Dakar, Isidre Esteve pudo comprobar su eficacia llevándolo durante toda la competición y terminando sin ningún indicio de úlcera en su piel. El estado del piloto se monitorizó y siguió día a día por un equipo especializado. El estudio resultante fue concluyente evidenciando la efectividad del cojín inteligente para la prevención de UPP.

Finalmente, OKM Química Ortopèdica, con más de 17 años de experiencia en el sector ortopédico y con presencia en más de 50 países, se ha incorporado recientemente en este proyecto con el objetivo de convertir el cojín inteligente en una solución real y accesible para toda la población. La industrialización del cojín inteligente ha sido realizada por un grupo de trabajo especializado, colaborando expertos del sector industrial y médico.

El resultado de todos estos esfuerzos es el nuevo cojín inteligente Nubolo que estará disponible en el mercado próximamente.